Más disgustos para Esperanza.
Cuando escribo aquí sobre la tan traída y llevada “crisis del PP”, el esqueleto de los artículos siempre es el mismo. Primero describo la última salida de tiesto del representante que le toque de la derecha española, (aquí no se libra nadie porque cualquiera te da una buena declaración) luego comento la jugada y al final acabo diciendo que la izquierda está dejando pasar la oportunidad de demostrar todo lo que Madrid le importa al PP.
Hoy voy a empezar al revés.
Socialistas de Madrid, Tomás Gómez, todos: “¿Cuando pensáis empezar a demostrar a los ciudadanos que en Madrid no se está haciendo nada de nada en el último año y medio? ¿Cuándo vais a contarle a la ciudadanía que las luchas dentro de un partido no llevan a ningún sitio salvo al más absoluto fracaso de la ciudad y de la Comunidad Autónoma? ¿Cuándo? ¿Acaso no lo pensáis? ¿Acaso no queréis? Estoy bastante, muy preocupado al respecto. Si lo único que hace el “gobierno Aguirre” es desmantelar todo el sistema público de Sanidad, Educación y Servicios Sociales además de pelearse con todo bicho viviente para medrar en el partido jaleada desde los púlpitos de la COPE y El Mundo, por qué no lo hacéis llegar a los ciudadanos. ¿Por qué no es este el principio de la movilización de la izquierda madrileña?
Me estoy empezando a plantear seriamente la incapacidad manifiesta de esas Ejecutivas, de esas personas que nos representan. No se puede dejar pasar más tiempo. Como decía esa campaña en contra del maltrato animal, “Ellos nunca lo harían”.
Sólo hay dos opciones, o espabilar o dejar paso a otra gente que sea capaz de aglutinar la izquierda de Madrid, y convertir el murmullo ciudadano en una marea exigiendo que se gobierne en Madrid. Exigiendo que se hagan cosas. Es que por olvidarse de gobernar, se han olvidado hasta de las infraestructuras que les volvían locos antaño.
Como dije que hoy la estructura del escrito sería inversa, comento la jugada del día. Resulta que en una universidad privada de Madrid, (como no) Rajoy le ha vuelto a dar un revolcón (político) a todos los que le tachan de mediocre, de blando y de acabado. Resulta que desoyendo a los medios afines y a los poderes fácticos de la derecha, ha confirmado que Gallardón estará en su equipo. ¡Qué golpe de efecto! Lo que faltaba es que reconociese que no fue en las listas al Congreso porque se lo exigía Federico, pero que por él por supuesto que hubiera ido.
El peligro de esto es que mañana los periódicos, las tertulias y las teles se lo van a querer merendar, recomendaría su lectura y su escucha encarecida mañana, os garantizo que no va a tener desperdicio.
Mariano, Mariano, has seguido alimentando demasiado a los perros guardianes y ahora que has decidido ponerles a dieta te quieren comer.