Debo confesar que tenía muchas ganas de que el día de ayer llegase. Primero por mera curiosidad, malsana y segundo porque tenía muchas ganas de que muchos comenzasen a tragarse tantas palabras vertidas en el último año y medio.
Y el día no me decepcionó. Ver a la derecha volver sobre sus pasos, renegar de su “bajando impuestos se recauda más” y echando la culpa a la herencia recibida después de decir que el traspaso de poderes había sido modélico, me gustó, me gustó.
La subida de impuestos era inevitable, eso lo sabíamos todos, todos, incluso Rajoy y su equipo cuando lo llevaban negando desde que se anunció el adelanto electoral. Es lógico y lo he escrito aquí en multitud de ocasiones, la reducción del déficit pasa por reducir gastos y aumentar los ingresos, los ingresos se aumentan recaudando más. Pues ahí está la subida.
La verdad es que no me desagrada del todo. Esa subida del 7% a las rentas más altas me pone bastante. Es obvio que el IRPF había que aumentarlo, no se puede mantener unos tipos impositivos de época de bonanza, e insisto una mayor recaudación es vital.
Lo demás ya no es tan acertado. Para empezar la subida de impuestos queda incompleta. Es necesario ser más contundente con las rentas del capital, no ignorar las grandes fortunas, incluso hablar algo de las sociedades…
Pero si hay algo que me encanta es la fijación mesiánica de la derecha española. Como ellos inventaron eso de crecer al 10% gracias a la vivienda, han decidirlo repetirlo insistentemente, porque va a dar el mismo resultado sea cual sea la situación histórica, independientemente de que los bancos no den crédito, de que la no haya liquidez para la compra… Pues nada, como salió medio bien una vez, apoyemos de nuevo la economía del ladrillo. Error.
Y des soslayo, lo que casi no cuenta, eliminar la investigación y desarrollo. La investigación, lo que hace progresar un país, lo que le permite desarrollar nuevas patentes, producción de alto valor añadido, error… Eliminar la ayuda al desarrollo y cancelar la ayuda a la dependencia, porque las subprime son culpa de los negritos africanos y de los ancianos con Alzheimer… obvio.
Pues nada diez millones y medio de españoles, abstencionistas y visionarios, a tragar.
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