miércoles, septiembre 24, 2008

Priva... privatizando.

Los madrileños, de nacimiento, de adopción y sobre todo de voto, tenemos lo que merecemos, aunque pronto, cada vez más cerca podría decirse que no tenemos lo que merecemos, que no deja de ser lo que votamos.

Estos días de vuelta a la actividad regular, tanto el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón como su archi adversaria política Esperanza Aguirre, han decido comenzar una estresante carrera privatizadora del patrimonio de los madrileños.

Era la semana pasada cuando Esperanza anunció el sacar a bolsa el 49% del capital social del Canal de Isabel II, como ya venía rumoreándose mucho tiempo, con el fin de que la compre o bien Aguas de Barcelona, que por mercado es la empresa que puede permitirse el negocio, o bien amigos de la familia... puestos a pensar mal, más o menos, como la funeraria pública de Madrid, que ahora da pingües beneficios y hará unos años fue vendida por 100 pesetas a amigos de Alvarez del Manzano.

Es ahora cuando Alberto, que comenzó criticando la carrera de la privatización baraja la posibilidad de privatizar la gestión del alumbrado público de la capital durante dos décadas.

Es lo que tienen las obras faraónicas con escasos plazos temporales y sin una buena previsión económica, (M-30 = 4.000 millones de euros). Ahora en tiempos de crisis, las entidades locales y autonómicas también tienen que refinanciar su deuda y es ahí donde empiezan los problemas y donde servicios públicos básicos se van a poner en manos privadas a no mucho tardar, a precios de ganga, siendo no más que pan para hoy y carencia de servicios de calidad para los ciudadanos mañana.

La pena, es que estos instrumentos del liberalismo en servicios públicos básicos no son, ni mucho menos, patrimonio de la derecha, (aunque ciertamente son ellos los que lo explotan con mayor profusión) dirigentes de otras comunidades autónomas, entre ellas Baleares y Asturias, de signo político contrario, han establecido un procedimiento similar a fin de costear sus nuevos hospitales. Error. Error mayúsculo el poner los servicios públicos básicos en manos privadas.

La sanidad pública madrileña ya está en manos privadas en un grandísimo porcentaje, eso es simplemente espeluznante, pero no tiene mucha solución ya. Es curioso que, según afirmaba el diario Público la semana pasada, el anuncio de presentación del pliego de condiciones de los hospitales de Villalba, Torrejón, Móstoles y Carabanchel, comenzase del siguiente modo:

"Conozca las peculiaridades del nuevo pliego de condiciones administrativas particulares del nuevo Plan de Infraestructuras y aproveche las oportunidades de negocio para su empresa".
Negocio y sanidad, peligroso cóctel.

Me pregunto cada día más habitualmente ¿dónde estará la oposición de la capital?

viernes, septiembre 19, 2008

No, la economía no es ninguna ciencia.

Creo tras múltiples debates internos que puedo llegar a esa conclusión. A pesar de que hay muchos indicios como la fuerte base teórica o la utilización de matemática, no muy complicada todo sea dicho, para el desarrollo de las teorías, la economía no es ciencia. Donde falla esa posible catalogación es en el desacertado de sus previsiones y en lo parcial de su aplicación.

Cuando se estudia astronomía o geometría, por ejemplo, los hechos que se predicen ocurren. En economía no. De hecho en Economía, las previsiones siempre se hacen a posteriori, lo cual no deja de ser un curioso contrasentido.

Es ese el punto el que convierte el arte del economista en superchería a utilizar para el mal. (Siendo muy catastrofista)

Ayer, perplejo, volvía a observar como la moderna política del no intervensionismo era saltada a la torera para rescatar de nuevo las compañías de inversión y de productos de seguros financieros más importantes de Estados Unidos. Para rescatar las inversiones de potentados multimillonarios y directivos de empresas que ellos mismos han encaminado a la ruina, llevados por la avaricia y por una muy arriesgada gestión.

Es lo curioso de todos aquellos que critican el intervensionismo económico. El intervencionismo es una atrocidad para regular el mercado de bienes de primera necesidad como la vivienda, como el combustible, pero sí vale para salvar millonarias inversiones de los poderes fácticos económicos y las grandes fortunas del país.

Por eso la Economía no es una ciencia. Porque Newton no enunció su ley de Gravitación Universal con el ánimo de que fuese usada para unos sí y para otros no. No se planteaba dejar a los más poderosos sin su 9,8 de aceleración de descenso vertical. La economía no es universal. Puede cambiar sin duda y sin escrúpulos en cuanto los que la manejan lo decidan. Nos saltamos las teorías, las tendencias y las previsiones, por el propio bien o por el de los allegados.

jueves, septiembre 18, 2008

Calle 30, Madrid e Ingeniería. (Dejando de lado la crisis)

Peligroso cóctel ese que combina estos tres elementos, desde dentro del gremio al menos eso parece.

Al hilo de la granizada que nos azotó hace un par de semanas, en la capital del Reino, que causó la inundación de uno de los túneles, D. Manuel Melis (responsable máximo del soterramiento de Calle 30), en una carta enviada al diario El País critica la forma en que se están ejecutando los trabajos de Madrid Río, presuntos causantes del desaguisado.

Estas obras, de escasa brillantez, provocaron unas goteras inmensas que inundaron el tunel. Según Don Manuel Melis, “Lo que no se puede hacer es [...] para poner un jardín encima, hacer enormes agujeros en el techo de los túneles por donde circulan los coches”. Esta frase, que bien podría suscribir cualquier niño de primaria se convierte en una frase llena de sentido cuando la pronuncia uno de los ingenieros más brillantes que ha dado España en los últimos años.

En Madrid, últimamente parece que en esto de la ingeniería vale todo, o al menos casi todo. Hasta ahora, en los últimos años con esos plazos tan apretados, en Metros y Calle 30 (en eso sí que disiento del Profesor Melis), el talento de los ingenieros y en algunos casos la misma Providencia ha acompañado las obras que se han ido ejecutando. “El todo vale” siempre que no estorbe en el plazo y no sea excesivamente arriesgado se ha instalado, no sólo en las obras de entidad sino en diseños como el de Madrid Río, de segunda fila. De ahí pequeños grandes desastres como el de la última inundación de la M-30.

Las obras civiles sí tienen sus plazos y sus correctas formas de ejecución. La profesión está empeorando y estas pinceladas no son más que la punta del iceberg. En Madrid, llevados por el dinero fácil (de eso podemos hablar otro día) y la inercia de plazos endemoniados pasados se arrastra un modo de actuar al menos peligroso.

Conducir desde la losa de cubierta hacia el interior del túnel, conductos de drenaje a modo de aliviaderos, no es la mejor solución ingenieril para el drenaje del Gran Parque Madrid Río, eso lo sé yo, lo dice un sabio y podría asegurarlo hasta quien asó la manteca, ¿a quien se le habrá escapado?

Nunca lo sabremos.
¿Es la economía una ciencia?

Voy a hacer un ejercicio, un “collage”, buscando opiniones de expertos en economía en distintos medios de comunicación. Echadles un vistazo.

“Se combina actualmente un fortísimo parón de las ventas de viviendas, junto con una crisis de confianza de los consumidores y de liquidez del sistema financiero. Todo ello incide directamente en la línea de flotación de las promotoras inmobiliarias que se ven privadas de sus fuente de ingresos natural, que no pueden desinvertir a corto plazo sus excedentes de suelo y se ven abocados al cumplimiento de los compromisos financieros que fueron dimensionados para un mercado inmobiliario que ya no existe.

La gran mayoría de las inmobiliarias están atravesando situaciones muy complicadas. La principal recomendación es que no intenten remar contracorriente sino que acepten y asuman la realidad cuanto antes, reduciendo costes de estructura, liquidando ramas inactivas y refinanciando su deuda. Todo ello, asumiendo el compromiso de realizar fuertes desinversiones en el medio y largo plazo.” (Mikel Echevarren)

“Muchos pequeños inversores se ven atrapados en esta situación con una única pregunta: ¿Qué hacemos ahora? Según los expertos, la clave está en no vender y mantenerse. En tiempos de tribulación no hay que hacer mudanza.

Si a estas fechas sigues en el mercado no debes vender, porque si eres un inversor técnico, o buscas beneficios a corto plazo, ya deberías haber vendido hace meses, cuando los indicadores empezaban a advertir esta situación.” (Miguel Ángel Torres)

“De lo que estoy seguro es de que el crecimiento de un país no debe basarse en el mercado inmobiliario, como es el caso de España. Lo que necesitamos para lograr la sostenibilidad es que las empresas crezcan siendo responsables, ya que desarrollar tecnologías con productos más responsables hará posible el crecimiento económico. Esta situación es similar tanto para la economía española como par la norteamericana.” (Finn Kydland, premio Nobel 2004)

Me gustaría plantear un pequeño debate desde un foro tan modesto como este, pero ¿no os parece fácil las previsiones a posteriori? ¿Si todos sabíamos esto, se podría haber prevenido?

Los artículos son dos previsiones a posteriori y un consejo sobre inversión... Mañana os comento lo que opino al respecto, pero antes, me gustaria escuchar opiniones... soy demasiado intervencionista.

lunes, septiembre 08, 2008

¿Nucleares?

Ya que ahora a nuestro Gobierno le da por abrir melones político teóricos como inicio de temporada, quiero yo tocar éste que tiene además tientes económicos.

Parece mentira que aun en plano siglo XXI no seamos capaces de desmitificar el debate de las centrales nucleares. Si queremos hacer algo de autocrítica, es más un problema de la izquierda que de la derecha, eso de saber si las centrales nucleares nos convienen o no.

A pesar de esta última reflexión, creo que la sociedad española está muy mediatizada y en su conjunto en contra de las centrales nucleares. A esto se le suma también la gran dificultad de vencer las reticencias locales, comarcales, provinciales y autonómicas que si bien ponen pegas a la instalación de una cárcel en sus terrenos, qué no harían si se anuncia la instalación de una hipotética central nuclear.

Pero volviendo al debate inicial, al de fondo, es necesario recordar, sobre todo ahora en tiempos de crisis, que la independencia energética es vital para mantener una buena salud a largo plazo de un país. En nuestro caso, dado que no estamos en las orillas del mar Negro, y que desde mi punto de vista la instalación de molinos de viento y de cultivos de paneles solares no son más que parches contra los que los ecologistas deberían luchar con más ahínco que contra lo nuclear, la única solución viable, razonable y a largo plazo es la energía nuclear.

Pero no sólo por el bien energético y económico que produce sino por el gasto en investigación y desarrollo que lleva aparejado, eso sí que potencia y desarrolla una comarca. Lo más grave, es que si seguimos con la postura de la moratoria nuclear, que por si no se han dado cuenta, tampoco la oposición tiene agallas para poner en juego, estamos jugando en otra categoría, en una segunda división energética, donde los países que tienen el petróleo en sus manos (a modo de talento natural) y los que han apostado fuerte por la energía nuclear (porque están ahí a golpe de talonario) nos cierran el paso, a los que jugamos con baratos, ecológicos y modestos medios de creación de energía.

La producción de energía nuclear tiene una serie de ventajas y desventajas bien conocidas. Se conoce que su emisión, es mucho menos nocivo en lo qua emisiones a la atmósfera se refiere que el consumo de combustibles fósiles, que al menos por ahora es inagotable, y que se encuentra en manos de todos, sea cual sea el país que deseé explotarla. Obviamente, y sería necio negarlo que nos consta también que aún no se ha encontrado un modo inocuo de deshacerse de los residuos que produce la fisión nuclear, y que los agujeros de seguridad en las centrales deben ser exhaustivamente controlados para evitar accidentes de funestas consecuencias.

Algunos creen que este debate se encuentra apagado de manera artificial por las compañías eléctricas, y que existen grupos de poder económico no interesados en la creación de estas centrales, por estirar los beneficios que las actuales fuentes de energía ahora reparten. Puede ser, pero ¿es eso lo inteligente?.

Yo no lo creo. Personalmente, siempre he apostado que para ser un país de primera línea hay que jugar todas las cartas, y en el poker energético, los ases es la energía nuclear... no deberían dejarse en la caja.

domingo, septiembre 07, 2008

Esto es crisis de verdad.

Dice un dicho económico que cuando Estados Unidos estornuda, Europa coge una pulmonía. Si esa “norteamericodependencia” fuese cierta, yo me echaría a temblar una vez que he leído esta noticia esta mañana sobre el mercado americano de las hipotecas, que sí son lo s verdaderos culpables de la reciente crisis occidental.

“Fannie Mae y Freddie Mac, que sustentan más de la mitad de la deuda hipotecaria del país, han sufrido perdidas combinadas de 14.000 millones de dólares en el último año debido principalmente a la crisis de los créditos de alto riesgo.

El Congreso aprobó a finales de julio un plan de emergencia que presentó el secretario del Tesoro para ofrecer una cantidad indeterminada de crédito público a estas empresas, o incluso para que el Gobierno comprara acciones en caso de que fuera necesario para evitar su desplome.

En este periodo las compañías no han conseguido ganarse la confianza del mercado y la Administración ha decido actuar para evitar el impacto mundial que tendría su colapso. El viernes, en la Bolsa de Nueva York, las acciones de Fannie Mae cayeron 1,54 dólares (el 22 por ciento), hasta los 5,5 dólares, y las de Freddie Mac 1,06 dólares, hasta 4,04 dólares (el 21 por ciento).”

La no intervención del mercado norteamericano y el mítico “laissez faire” es lo que tiene y lo que conlleva. ¿Os imagináis un escándalo similar en la supuestamente intervenida economía europea? Impensable.