Esta semana se cumplió un año del día en el que nuestro Presidente debió dimitir (exactamente el pasado 12 de mayo) porque la presión de los mercados y el capitalismo internacional no debe ser ni un parapeto, ni una excusa para desarrollar políticas justas, y porque la política económica de izquierdas debe ser inquebrantable, incluso a pesar de presiones externas ineludibles..
Me duele, porque defendí durante años, a capa y espada que podríamos sentirnos orgullosos porque este Gobierno no daría nunca un paso atrás en los derechos de los más desfavorecidos, de la clase trabajadora. Me dolió y aun me duele.
Pero en una macabra coincidencia, en las mentes de las gentes progresistas, hace una semana, (más o menos, no seamos puristas) vimos como otra gran esperanza blanca, con un Nobel a sus espaldas, para más inri, prostituía sus convicciones, o al menos las mías y asesinaba a sangre fría a un criminal, en un acto indigno de terrorismo de estado.
No obstante, no sé qué es peor, la verdad es que no sé si me parece peor el hecho en sí o la ovación espectacular que le propinó la comunidad internacional.
Dado que creo que este hecho innegable se condena por sí sólo, quiero terminar hilando este deplorable, condenable y poco ejemplarizante delito con unas muy coherentes declaraciones que Baltasar Garzón hizo esta mañana en una entrevista que aparece en Público y que fue concedida al estadounidense medio de Democracy Now.
A su juicio, y reproduzco palabras textuales, "resulta evidente que la acción de eliminar a Bin Laden es un asesinato". A su parecer, por lo tanto, la ejecución de Bin Laden "no es la solución correcta desde el punto de vista internacional".
Tan claras como inapelables declaraciones, ¿no?. La pena, es que ahora Garzón se ha quedado sin bando que lo defienda, y será un perpetuo ponente acá o allá, vagando en el purgatorio de los justos, porque la izquierda le rechaza por rencor y falta de valentía y la derecha porque tiene mucho más que callar.
Malos aniversarios los de esta semana, queridos. No es para estar muy esperanzados.
1 comentario:
Ves como si que he sacado tiempo para leerlo?. Y ahora ¿Que? El desencanto que se siente cuando las personas en las que pones tu confianza te defraudan es muy grande pero yo no quiero rememorarlo cada aniversario porque se me plantean las dudas de que hacer a partir de ahora.
Creo que volvere a tiempo para VOTAR porque como no facturo............
Nos vemos el domingo.
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