lunes, diciembre 04, 2006

Amenaza que es una oportunidad.

Mientras escribo estas líneas miles de venezolanos están escrutando unas elecciones cuyo ganador es Chávez. No es ningún alarde de videncia, sino que dado que el actual presidente de la Republica Bolivariana goza de un gran apoyo popular, los avances de las encuestas y que la oposición (financiada sin tapujos por las correspondientes ingerencias estadounidenses) ya anda poniéndose la venda antes de tener la hemorragia con las acusaciones de fraude, la cosita esta muy clara.

Si apagas el ordenador y escuchas cualquier noticiario parecerá que han llegado los marcianos a la tierra, que occidente debe temblar, que vienen las hordas de Atila a pisotear nuestros dominios. Parece que todos los tertulianos de cabecera (en esto curiosamente coinciden), ven el movimiento populista pseudo-izquierdista que emerge de Latinoamérica como una amenaza al sistema capitalista en pleno y que no quedará más remedio que volver a mandar las carabelas llenas de misioneros con ansias imperialistas...

La realidad es que estos movimientos no son mas que un mecanismo de defensa de países que se encuentran subyugados y ahogados dentro del capitalismo mundial, con aranceles a sus materias primas y millones de personas del primer mundo haciendo negocios con pingües beneficios a costa de mercadear con las materias que se expolian de una de las zonas mas ricas del planeta.

Los Evo Morales, Ollanta Umala, Hugo Chavez, e incluso en menor medida Lula da Silva son exponentes de las ansias de los pueblos latinos de optar al reparto de riqueza. Ansias de intentar poder participar del agua que se escapa entre las manos y que se recoge en grandes cubas varios miles de kilómetros al norte o en Europa. Nosotros desde aquí lo vemos como una amenaza.

Una amenaza a nuestros intereses y al sistema establecido. Lo percibimos como una “revolución mundial” donde los millones de desfavorecidos han enloquecido y votan a dirigentes sin escrúpulos cuyos mayores méritos son nacionalizar extracciones de petróleo. Amigos, hay que mirar algo más allá y comprobar de dónde le viene el ingente apoyo popular a estos políticos. El escenario que encontramos es de fácil solución. Buscan, con mayor o menor acierto, algo de reparto y minimizar el ratio de desigualdad y eso les valora el pueblo, aunque en el peor de los casos sólo se queden en intenciones.

Millones de dólares se han gastado y se seguirán gastando desde Estados Unidos buscando manejar los países, las materias primas y las voluntades de los pueblos latinoamericanos. Hay que impedirlo. Hay que impedirlo no en virtud de la búsqueda del reparto de la riqueza, ni el triunfo del comunismo populista, ni siquiera en la organización de un homenaje al Comandante en sus horas bajas... sólo hay que impedirlo buscando la libertad de los pueblos constituidos... la inherente a los pueblos, voluntad de decidir.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

el tiempo es oro, el que lo pierde un tonto.

Anónimo dijo...

No sé si dedicarle tiempo a algo que me entretiene y me divierte es perder el tiempo. Haztelo mirar.

Alfonso Estebanez

Anónimo dijo...

kkkkjjjjj