Nos engañan, os engañan.

Amigos, la derecha de España, os vuelve a engañar. Una vez amortizado el terrorismo como arma electoral, hasta el primer atentado, no lo olvidemos, se abre el dietario por el tema 2: Cataluña.

No es que esté cerca la campaña del cava, bebida espumosa a la que la cercanía de las elecciones evitará que se le vuelva a plantear el agresivo boicot en su escala máxima, sino esta vez toca otro tema de los más manidos, las selecciones autonómicas.

Tras el fracasado experimento del hockey patines, que fue podado de raíz por todos los comités olímpicos del mundo, el español incluido, ha decidido tirar la derecha española, reportaje de Telemadrid incluido, de un torneo de Futbol Sala amateur en el que se han enfrentado unos españoles contra unos catalanes agrupados en equipos diferentes.

La calidad de las imágenes emitidas, de cámara de video barata, dan una sensación de la cobertura mundial del evento. Para los no iniciados, os comentaré que la liga de Fútbol Sala española aún se está jugando, que en breve comienza la final y la juegan Interviú Boomerang y El Pozo de Murcia, por tanto, obviamente, no es posible organizar ninguna competición oficial en estas fechas. De hecho, no había ningún jugador de primera fila en ese torneo. Pero ni de primera, ni de segunda, ni de tercera fila, era un torneo de amiguetes, ni oficial, ni profesional, ni serio, vamos una pachanga.

Pues bien, el torneo de marras, apadrinado por la Asociación Mundial de Futsal, un conglomerado de asociaciones que no reconoce ni la FIFA, ni la Federación Española, ni la Federación Catalana, ha merecido minutos de televisión que yo pago, páginas en El Mundo, que no pago, pero que me molesta que paguen mis amigos, comentarios de bar, etc...vamos polémica pura y dura. Hoy he visto a Zaplana comentando en el Congreso la noticia, pidiendo que comparezca la Ministra de Cultura y me ha parecido que lo comentaba sonriendo, pero no. Se estaba carcajeando (“descojonandose”) de que a alguien le pareciese de repercusión esta vital pachanga de la que dependía el futuro de la humanidad.

Con todos mis respetos, agotada la conspiranoia, vuelven a engañar. Pero vuelven a engañar chapuceramente. Vuelven a magnificar cosas que carecen de importancia y que una exposición objetiva y el tiempo, les dará su debida trascendencia. Pero me molesta que me engañen y me molesta tener que explicar al que me increpa con el dichoso partido que toda esta bola es una soberana gilipollez.

La bola, en este caso, va dirigida, con perdón si suena machista, a las mujeres. Quizá no a todas pero sí a muchas. Es un engaño teledirigido. Esas mujeres a las que se les hace pensar que este torneucho es la Copa América del Fútbol Sala y que se lo creen al no tener ni ganas, ni información para cotejarlo. Y se van a la cama creyendo que la selección de Cataluña ha jugado y vencido a España al fútbol sala.

Con estas cosas engañan a los que no saben de fútbol sala, intentan engañar a los que sí y engañan a sus propios votantes, que me increpan esta mañana, “¡ves! ya la selección catalana juega contra España, dentro de poco en las Olimpiadas” haciéndoles ir por ahí recitando de memorieta esa soberana gilipollez. Nos intentan engañar a todos.

Por último una recomendación veraniega. Por favor, si jugáis partidos de lo que sea, en el Camping, en la Playa o en el Hotel al que vayáis, por favor haced los equipos por sorteo, a ver si vais a decir eso de: “Jugamos los de Candás contra el resto”. Igual os da un soponcio al ver a Curri Valenzuela y a Esperanza Aguirre grabando el partido para pasarlo en el Telenoticias de la noche y os acusen de ser unos separatistas irredentos, amigos de Carod Rovira.

Ya sabéis: se rompe España. Se lleva rompiendo tres años.