miércoles, agosto 01, 2007

Hoy San Alfonso, mañana ya veremos.

San Alfonso María de Ligorio, nació en Nápoles el año 1696; obtuvo el doctorado en Derecho, recibió la ordenación sacerdotal e instituyó la Congregación llamada del Santísimo Redentor. Para fomentar la vida cristiana en el pueblo, se dedicó a la predicación y a la publicación de diversas obras, sobre todo de teología moral, materia en la que es considerado un auténtico maestro. Fue elegido obispo de Sant’ Agata de’ Goti, pero algunos años después renunció a dicho cargo y murió entre los suyos, en Pagami, cerca de Nápoles, el año 1787

No es mala biografía, ¿no? Pero voy a destacar un pequeño dato que no destaca en la mayoría de las biografías. Parece ser, (porque en esto de la Iglesia nunca se sabe) que abandonó su puesto de obispo para dedicarse a los fieles. Hace tiempo los lectores, (cada dia menos, para qué nos vamos a engañar de este nuestro blog) pudieron reflexionar acerca de la actitud de nuestro ex presidente Aznar.

Estos días ha vuelto a salir a la palestra gracias a sus contubernios, poniendo en contacto a inmobiliarias con dirigentes internacionales, explotando sus relaciones mediáticas... y criticando la política internacional de nuestro Gobierno.

El presidente de Argentina, Néstor Kirchner, se reunió este miércoles con el ex presidente del gobierno español José María Aznar, quien acudió a la cita para presentarle al empresario inmobiliario estadounidense Joseph Roberts.

Sin dar otros detalles de la entrevista, los portavoces se limitaron a señalar que "Aznar le presentó a Kirchner al señor Roberts, cuya empresa tiene inversiones inmobiliarias en Argentina".

El Presidente forma parte del consejo asesor latinoamericano de dicho grupo, al igual que del fondo de inversión británico de capital de riesgo Centaurus Capital, que gestiona activos por más de 4.500 millones de dólares (3.260 millones de euros).

Todo esto, mientras su santa esposa salía en un documental que el “arrastrao” de Buruaga le perpetraba en Telemadrid.

A mí, lecciones de esas me hacen falta bastantes pocas. Para ser santo, lo primero es parecerlo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

YO TE LEO.
:)

Alfonso Estébanez dijo...

Muchas gracias, Ana.

Por el apoyo y el animo que me insuflan tus palabras.